martes, 25 de enero de 2011

Esa eres tu

CANCION
Esa eres tu..
Aquella chica que siempre esta triste
La que se preocupa si le mentiste...
Esa eres tu....
La chica que se le nota en carne viva el dolor
La chica que necesita amor
Esa eres tu..
La que todo el dia se queja
Aquella que se hace pendeja
La mas inteligente chica del lugar
La que se arto de maquillar
Esa eres tu...
La chica que conspira con la luna
La que quita de mi mente cualquier duda.
La chica que tiene delirio de princesa
Aquella que siempre habla con franquesa
Esa eres tu....
La que en sus palabras tienen lealtad.
La que tiene llenos los ojos de ternura y bondad
La que sus cabellos son rojos como el fuego
La que con sus caricias comiensa un juego
Esa eres tu....
La que se esconde detras de su hermano
La que se sacrifica embano
Esa eres tu...
La que ve antes por los demas
La que no te abandonara jamas
Esa eres tu...
La que al mismo tiempo es niña y mujer
Aquella que te obliga a querer
Esa eres tu..
A la que le an roto el corazon
La que siempre tiene la razon
Esa eres tu...
La que vive de sufrimientos
La que jamas la dejan los tormentos
Esa eres tu...
Aquella chica que siempre esta triste
La que se preocupa si le mentiste
Lachica que se le nota en carne viva el dolor
La chica que necesita amor
Esa eres tu...

sábado, 22 de enero de 2011

¿Quieres?


En los adentrados bosques del frío Canadá, caminaba con pasos lentos jugueteando en el camino con la gran cantidad de nieve, tapado con un abrigo marrón grueso, un gorro, y una linda bufanda verde que el tanto quería.

Sacaba de su boca vapor por el frió, a que lugar se dirigía, no lo se, tal ves el destino lo quiso así o fue por pura casualidad, parecía que iba sin rumbo asta que llego a unas pequeñas construcciones de casas para pájaros de diferentes tamaños y colores.

El niño mostró una pequeña sonrisa al imaginarse lo mucho que se podría divertir en ese lugar.

Con sus manitas comenzó a juguetear las casas una tras una, parecía un cementerio una ciudad de nidos de aves, se adentro mas a través de las casas de madera, llegando a un punto en donde se encontraba un hueco lo rodeaban las casas, el niño al ver que el lugar se ponía mas extraño se sentó a descansar y pensar que seria ese lugar tal vez solo estaba soñando, se había quedado dormido mientras caminaba eso me paso, pensaba el jovencito.

Sintió un dolor en el estomago notando claramente que el hambre se dominaba de el, saco un pan de una pequeña mochila que llevaba y se dispuso a darle una mordida, cuando lo vio alzando su mirada.

Un ave enorme con facciones en el cuerpo que solo eran pertenecientes a humanas, al principio lo miro con gran terror al grado de pensar salir corriendo y gritando, pero su mirada se cruzo con la suya notando la posición en la que estaba sentado, inclinado queriendo tapar su cuerpo con las alas, en sus ojos se podía notar una profunda tristeza y soledad.

El niño se levanto y con paso lento se acerco a la criatura, al estar enfrente de ella estiro el pan y con voz tierna le dijo:

Niño: ¿quieres?

El gran ave, algo confundido tomo el pan que le ofreció el niño, comenzándolo a comer despacio saboreándolo.

Gran ave: ¿Por qué no as huido como los demás?

Niño: *mientras sacaba otro pedazo de pan ahora este llevándoselo a la boca- Pensé que tendrías hambre esa cara tan triste me dio el presentimiento- hablando con la boca llena.

Gran ave: *tomando bocados del pan-Todos siempre corren al verme, nunca nadie se sienta o me habla mucho menos me da comida… eres el primero que lo hace- con una voz triste y desesperando entrando en llanto.

Niño: No llores, ¿dime que eres que haces tú aquí?

Gran ave: Soy el Postjet y guardo la vida de cada ave que exista en el mundo cada casa que vez a tu alrededor representa vida, muerte, y renaciendo de alguna de ellas, un ciclo por el cual pasamos todos, estoy condenado a no salir de aquí, si saliera moriría solo puedo estar en esta tierra santa, me condeno Dios por los asesinatos que cometí cuando era humano y tu ¿Cómo llegaste asta aquí?

Niño: Escape de casa, mi mama me pegaba mucho, no tengo papa soy de un pueblo que esta a las lejanías de aquí, no aguante mas el trato de mi madre decidí buscar una vida mejor, yo se como se siente que nadie se te acerque, solo por que es alguien una clase social inferior solo por que provienes de una familia que no tiene bienes materiales e caminado 2 días buscando otro pueblo pero me encontré este gran lugar y me alegro de eso, ¿puedo quedarme contigo?

Gran ave: *con voz alegre y cara confundida dibujando una sonrisa en aquel gran pico que tenia – Claro que si pero recuerda tienes que salir a las afueras de este campo aun que sea unas horas, tu cuerpo no puede aguantar esta tierra sagrada mucho tiempo-*

El niño se acerco a la gran ave, dandole un abrazo calido buscando protección en el y en un llanto agudo comenzó a llorar.

El ave recibió su abraso envolviéndolo en sus grandes alas, quedando los dos profundamente dormidos.

A la mañana siguiente cuando el niño despertó vio al gran ave poniendo y sacando plumas de algunas casitas.

Niño:*-¿Qué haces?- pregunto en todo curioso

Gran ave: *-devuelvo, mato y doy vida a las aves, es un ciclo a cual quiera le da la hora de morir y otras vuelven a nacer es el destino que tiene la vida-tomando unas plumas y dándoselas al chico -¿quieres intentar?

El niño feliz mente acepto colocando y quitando plumas de los lugares donde le indicaba el ave.

Después de un rato el niño se canso quedándose dormido, olvidando por completo las palabras que le dijo tienes que salir un rato, se perdió en el sueño y no supo mas.

Cuando el ave termino el trabajo vio al chico en la nieve acostado, pensó que estaba dormido asta que se fijo en su piel mas pálida.

Corrió asta donde se encontraba, dando un grito de desesperación al aire oprimiendo en sentidos en corazón del niño para que respirara, moviéndolo para que reaccionara, de sus ojos comenzaron a brotar lágrimas y en voz baja susurro…

Gran ave: *-Es lo único que puedo hacer para que el este bien...- tomo al chico en brazos y tomo vuelo, alejándose de manera constante del lugar sagrado, cada vez mas lejos sentía que su respiración decaía, que sus alas se entumecían, comenzaba a mirar borroso, y su corazón comenzó a parar, pero a el no le importo.*

Saliendo del lugar sagrado un poco alejados no pudo mas y bajo de manera brusca pero cuidando de no lastimar al niño, ya casi no podía respirar, movió al muchacho el cual recobraba su color de piel normal y abrió los ojos de par en par, el ave comenzaba a morir mirando al niño y dándole una sonrisa.

Niño:*-¿Qué hacemos aquí? Acaso no es cierto no salí del lugar, hey tu no puedes salir del lugar sagrado en que estabas pensando- dijo el niño en voz enojada y triste mientras sus mejillas se ponían rojizas el llanto se apodero de su ser, corriendo a donde se encontraba el gran ave tirado abrasándolo.*

Gran ave: *-No llores…. No podía permitir que murieras no después de ser la única persona que me a echo feliz, ser mi amigo ¿Quieres?-decía esta frase con mucho esfuerzo ahorrando algo de aire*

Niño:*-Claro que si, pero ahora por mi culpa morirás, quédate conmigo no te vallas ¿Quieres? Prometo portarme bien saldré a caminar fuera del lugar sagrado no te vallas.- llenando sus ojos de lagrimas, temblando por el miedo, su voz que carcomía por el sufrimiento.*

Gran ave:* le acaricio suavemente el cabello al niño, le dio una tierna sonrisa y dio sus últimos respiros diciéndole –No llores mi niño ¿Quieres? Regálame una sonrisa y dame felicidad no te preocupes después de todo es el destino que nos tiene la vida…gracias por todo, cuida mi casa... Cambia las plumas el lugar te dirá cual y a partir de mi muerte tu alma resistirá el lugar.-*

Niño:*le dio una sonrisa tierna pero a la vez se cubría de lagrimas y gritos de angustia- no se valla por favor- lo decía en voz baja y triste*

Después de ver esa sonrisa que pidió el gran ave sintió una enorme paz, cerrando lentamente los ojos, dejando de respirar en ese momento en aquel lugar en las afueras, de ese pueblito alejado de Canadá, se cuenta que a sus alrededor se puede escuchar un lamento y sentir en el bosque una profunda soledad.

sábado, 1 de enero de 2011

La hora de la soledad


Días, horas, minutos y segundos ya nada tiene sentido…… ¿Quién soy yo? Palabras que rompen su significado al instante ya que somos nadie pero a la vez somos algo al vivir.
Sentada sobre el lago de los llantos en el sendero del perdón, echo de piedras y marfil con esa agua cristalina al alrededor, pareciente un bosque no se mira mas en aquel lugar de enormes vegetaciones abundantes, la noche tenue mágica florece…. los brillos del agua son como mil cristales al mirar el alma.
Sobre el reloj en medio del lago me encontraba, es gigantesco con toques de madera fina teniendo como secuencia un camino de reloj donde brincaban ovejas, de suaves lanas ondeándose como pequeñas nubes.
Miraba por el agua la luna, pensamientos lúgubres cubren mi ser, un minuto parece un segundo volviéndose horas hundida en pensamientos.
No es fácil ser la hija del padre tiempo …el tiempo es eterno, mi sufrimiento no tiene fin ….. Estoy completamente sola.
No hay nadie con quien pueda jugar, ni hablar mis padres ocupados están y mi trabajo de eternidad completa... ver y controlar cada segundo que se trasforma en minuto, todas las acciones de la humanidad que se ven pocos momentos de felicidad llenas de mentiras, odio y rencor, un ciclo sin fin donde no terminara el dolor, nada tiene sentido.
No tiene forma, cruel dura es la palabras y acciones del ser que todo lo quiere ver bien….
Estoy sometida a una gran hora de la soledad

Estrella Fugas

En un lugar muy lejano, cual nombre no puedo recordar, en aquella casa humilde, de ese pobre lugar.
Un abuelo con cabellos ya canosos, mirada perdida en el tiempo, arrugada en su piel, portaba ropa gris cual era su costumbre.
La casa pequeña humilde, con una pintura café, gastada por los años, suelo de tierra seca, muebles viejos de madera.
El abuelito sentado en una mecedora, tambaleándose en ella, algo encorvado, se ajustaba con mano diestra los lentes grandes que tenia, miraba fijamente a su nieto, unos 7 años de edad tenia el chico, piel mestiza, con ropas sucias por el jugar en la tierra, miraba atento a su abuelo ya que tenían una charla …
Niño: Abuelo vi una estrella fugaz, anoche cuando miraba por mi ventana, era muy rápida y brillante.
Abuelo: Sabes hijo mío, cuando veas una estrella fugaz guárdala en tu corazón, es el alma de alguien, que consiguió dar a los suyos su amor.
Los ojos rasgados de niño, miraba atento a su abuelo, mientras se sentaba en el suelo, para escuchar mejor. Ya sentado y de piernas cruzadas el niño pregunto.
Niño: ¿un alma que consiguió, dar amor?
Abuelo: si, esas almas se trasforman en estrellas fugases, en muestra que supieron dar amor en esta vida, y siempre brillara su luz, pues su corazón sacrifico su felicidad, para darle a alguien mas o supo dar este cariño especial, aquellas personas que en su existen lo rodearon.
Niño: ¿Y las almas, que no supieron dar amor, pero eran buenas?
Abuelo: Esas almas mi hijo, son estrellas, simples de brillante luz, que simplemente observan la multitud, en cambio la estrella fugaz es libre, como el viento, brillante como el sol.
Te contare una historia de una persona, que consiguió dar amor a alguien mas, su alma libre mente esta.
Hace 75 años, vivía en este pueblo una mujer llamada Dolores, la cual a sus 25 años de edad quedo embarazada, de un tipucho malandrín, que la abandono en corto tiempo, tras enterarse de la situación, la mujer lloraba día y noche, su mala fortuna.
Pero aquel hijo que esperaba, la hacia seguir adelante, ser fuerte por los dos.
Antes en ese tiempo una mujer embarazada y sin casar la tomaban como hereje, la pena era la muerte o el destierro.
Cuando el bebe tubo 5 meses, el pueblo se entero, ya no se ocultaba el vientre, ya otra manera no quedo.
Fue mandada al exilio, sin poder regresar se quedo sin hogar, sin poder regresar sin donde ir, vago por los caminos, asta que encontró, una humilde casa.
Toco a la puerta y le abrió una mujer rubia, de ojos cafés, la señorita Dolores morenita y de ojos azules, se arrodillo pidiéndole auxilio.
La mujer bondadosa la hizo pasar, la gente del pueblo tenia que pasar diario por esa casa, para cargar de agua los botes del pozo.
Mala fortuna, que un pueblerino la vio en el hogar, fue a decir al pueblo: ¡la hereje, no se ha ido, escondida se encuentra, por los montes!
Con palos y fuego fueron al hogar, y la pobre señora, con cariño y cuidado le dijo: ve al cerro escóndete en alguna cueva, asta que pase la multitud estarás a salvo, te llevare comida y agua todos los días.
Al pie, de la letra, siguió la instrucción, 4 meses mas pasaron con el sol.
Lo inevitable paso, la encontraron en aquel rincón, estaba dando a luz a gritos pidió un doctor, pero muy pocos a su ayuda atendieron, cuando el niño nació, atención le iban a dar, pero la gente del pueblo lo negaba y una decisión a la madre le hicieron tomar.
Solo una vida podremos salvar, decide tu hijo o tu bienestar.
La madre desangrando dio a elegir, salven a mi hijo, la mujer murió.
Le dio el amor de la vida, a su hijo a cambio de su felicidad, de nuevo normal.
Niño: ¿y que le paso a su hijo?
Abuelo: Esta sentado delante de ti
10 años después el niño, ahora era un joven de 18 años de edad, asomado por la ventana, su abuelo murió, no por causas naturales, fue por un balazo a defender a su nieto en un asalto, la noche oscura tétrica, mil estrellas opacas en el cielo sin fin.
Pero de un lado de la ventana, algo el cuarto ilumino, el muchacho una sonrisa en el rostro figuro.
Dos estrellas fugases que pasaron en el cielo, volviendo la noche mas tranquila…
El muchacho sabia que era el abuelo y su mama, que ahora están juntos y en libertad.
Brillan como nunca, ellos consiguieron dar amor.

LA HORA DE MI MUERTE


Soy Mileidy De San Marquez, tengo 18 años de edad, pertenezco a la asociación de los cristalomanticos, que estudiaban las artes oscuras.
Nos llaman sectas, escondemos nuestros estudios, ya que son considerados herejía y se paga con la muerte.
Yo eh dedicado mi vida a las antiguas artes de la necromancia.
Necromancia es el arte de traer muertos a la vida, por muchos llamados zombis, exageraciones de plenos siglos XVI, por no conocer el arte de este ritual.
En África es el santo oficio de estos seres, el cual los viles humanos le temen y preocupan no salir por sus vidas de noche.
Pero aquí España.
No es muy conocido y la ciencia no estudiada, es mi deber como cristalomantica culta investigar este tema…
Todo empezó un 8 de octubre que empecé a descubrir unos antiguos textos en escritura Aramea, los cuales vinieron de la gran biblioteca de Madrid, España que fueron subastadas por un viejo Alemán llamado Hakod Mellewson.
La subasta de esa biblioteca, claramente a ocultas, de su sagrada inquisición.
Me lleve estos pergaminos gracias a que poseo dinero de sobra, la herencia de mis padres los cuales ahora están muertos.
Ellos al igual que yo estudiaba esta antigua ciencia, mi padre Lorez De San Marquez y mi madre Melani de la Flor Liria, yo soy de tes blanca y cabello rojo sangre, siempre llevo un vestido rojo cual se melena ,formando un aspecto tétrico en mi ser.
De mi madre solo herede estos malditos ojos amarillos, los cuales parecen los de un gato en la oscuridad.
De mi padre todo lo demás, asta el intelecto por decirlo…
Mi padre fue el que me inculto las ciencias del ocultismo necromantico.
Teniendo el documento en manos, recuerdo lo que decía mi padre, de nunca jugar con los muertos de tal forma que sufría las consecuencias.
Pero este estudio me fascina, empecé a traducir los textos asta que quedo un conjuro, que decían conjuro y su técnica el cual no revelare por miedo a que sufran el mismo destino que yo…
Me dispuse a esperar el santo día de los muertos, llego al punto de que efectué adecuadamente las velas, simbología y como me decía un cuerpo de un muerto cercano a mi, no tenia alguno reciente, solo el de un joven universidad pretendiente mío, que siempre molestaba con temas de matrimonio.
Claro que no se interesaba en mi profesión, era un científico y al hablar de esto con el, lo haría burlar de mi herencia de mis investigaciones y por eso decidí que el fuera en carne viva, una muestra de lo que yo había descubierto o de aquellos conjuros que darían vida.
Lo asesine en su oficina arma un cuchillo, me acerque sigilosamente con pasos leves y deteniendo levemente el cuchillo en la mano derecha, me abalance contra el, cortándole el cuello con una expresión de miedo en su cara intentando respirar.
Su sangre corría en mis manos y en mi ropa que despertó en mi una rara sensación de diversión, debo comentar en este momento, que no siento culpa en haber asesinado a esa persona, lo aria de nuevo.
En el lugar de su muerte es ahora que esta, el ritual que estoy apunto de iniciar, no lo moví ya que quiero que este fresco para cuando llegara el momento.
Espere a que la luna tomara su punto y la hora muerta las 3 AM, empecé a decir las palabras del conjuro, estaba dando efecto se estaba parando el muerto, con una capa de sal alrededor para evitar que escapara era como ver el infierno se volvía un monstruo todo mal formado, que estaría a mi servicio, me reí de una forma macabra era una risa no humana que jamás oí salir de mi.
Pero para mal momento tumbaron la puerta, alguien dio aviso a la santa inquisición y ahora que me arrestaron y el cuerpo mal formado se deformo otra vez con el solo contacto de la entrada de ellos.
Estoy justo en este momento, en la horca donde seré juzgada, por bruja herejía y contactos carnales con el bajo mundo, cuento esto desde aquí el lugar donde se dará juicio para que quede el testimonio, de esta mujer la cual dio vida a una criatura, un paso para la ciencia de mi protección, aquí acaban los días , esta es la hora de mi muerte.

EL NIÑO NO TIENE LA CULPA


Esta historia comienza una fría mañana de noviembre, con cielo nublado semejante al que hay antes de llover, una brisa helada que llegaba al alma, el niño de 9 años se levantaba lentamente de su cama con frió en todo su cuerpo, con su cuerpo pálido, con escalofríos por el frió de la mañana aquella, pelo negro corto un trajecito de escuela negro, playerita como de marinero con corbata blanca, unos pantalones cortos negros seguida de calcetas blancas y zapatos negros sucios.
Su madre señora muy estricta de piel blanca y suave cabello, siempre agarrado en un chongo de color negro cual cabello de su hijo, vestido gris cual era su gusto.
Llamaba a su hijo que bajara a desayunar, la noche pasada le pego una paliza solo por que el niño se le olvido recoger sus juguetes cosas de niños, con voz tensa y enojada le grito a Rafael el cual era el nombre del niño, ¡baja a desayunar en este momento! Exclamo enojada la mujer.
El niño se paro de la cama con movimientos rápidos y bruscos desacomodando la cama poniéndose de pie y bajando corriendo rápidamente las escaleras que había hacia las habitaciones de abajo, se sentó en el comedor en la silla derecha a mano de su madre la cual lo miraba con enojo.
Recuerdos vagos recuerdos paganos que aquel chico no recibió amor, vivía con miedo de su madre desde que la memoria suya apareció, madre soltera era la señora el padre idéntico a el, el odio de la mujer crecía en cuanto al niño empezaba a crecer, cada día se parecía mas a su padre lo cual hacia que la señora le tuviera un odio incondicional al niño… ese niño no tenia la culpa, desde niño lo aterro con golpes y palabras crueles hacia su pobre corazón,
Señora: ¡eres un estorbo no debiste nacer!... ¡levántate holgazán solo sirves como basura!...¡eres un engendró que llego al mundo como desperdicio!.
Muchas otras palabras podríamos seguir pero no hay más que decir tras palizas y palabras el niño quedo hecho un desastre, todo empeoro cuando el niño se enfermo del corazón, la madre no lo quería el niño tubo que aprender a cuidarse solo... el horario de sus medicinas aguantarla y tener ese horrible dolor a causa de un taconeo de venas el cual no le daba buena circulación y reventabas las venitas.
El niño comió su serial que estaba en la mesa en un gran plato de vidrio pesado con cuchara de plata a mano, devoro todo de un solo bocado, se puso de pie despacio tomando el plato con sus dos manos, caminando a pasos cortado para dejar el plato en el lavabo, pero el niño escucho la voz de su madre gritando en el enojo ¡espero que hagas por lo menos eso bien!, el niño al escucharla del susto tiro el plato de vidrio ocasionando la ira de su madre , la cual agarro del brazo y lo golpeo con mano cerrado en su carita y cuerpo dejándolo sangrar un poco con moretones en su cuerpo, gritándole que se largara a la escuela en ese momento, el niño agarro su morralito que estaba a un lado de la silla y salio corriendo de la casa, cerrando la puerta con su mano izquierda fuertemente ocasionando el grito de su madre, ¡eres un estupido no sabes hacer nada bien, no debiste nacer!.
El niño lloraba por la calle limpiándose las lágrimas con sus manitas tocando la mochila con sus manos fuertemente, atrás de el venia alguien…
Caminando por la calle en su lado izquierdo una gran casa de donde la muerte podía observar con cara de infelicidad cada paso del muchacho mientras la nieve blanca caía sin parar.
Observando la pobre vida del niño su dolor, el niño seguía llorando sobándose los golpes que habían en su piel lloraba de dolor ya no podía estar de pie el niño se inclino en el piso a llorar, sintiendo otro dolor que no lo dejaba en paz sintió como su corazón se retorcía al mismo tiempo que no podía respirar, tirandoce en el suelo pidiendo ayuda, exclamando salvación, la muerte le llego, poniendo su piel mas blanca con aire de felicidad por el sufrimiento que ya no tendrá mas..
La muerte decía en lamentación que corta es la vida, que cruel puede ser murió tan prontamente y no la disfruto como la debe de ser, pobre niño no la disfruto, sufriendo tanto tiempo por algo que no hizo jamás , ese niño no tubo la culpa….

EL ESPEJO


Se miraba al espejo horas y horas pasando su cepillo por su largo cabello, 4 horas llevaba mirándose al espejo sus largos cabellos de oro curveados tales margaritas recién florecidas, ojos azules cual brillantes estrellas de la noche vil, sus mejillas con toque rosa, tal parecía una muñeca de porcelana, con vestido rosa figurando un algodón de azúcar, un moño en su cabeza que caía a su largo cabello de 10 a 13 años tenia la pobre niña, que preciosa se veía.
Que feliz parecía pero nada es como lo pintan, la niña se sentía sola, sentía un gran vació, sola en aquella grande habitación lleno de juguetes a su alrededor con muebles en forma de lunas, con osos cosidos por la mitad, de morado fuerte estaba decorado el cuarto, con pequeñas flores color carmín, donde la luz del sol algo pequeña llegaba al espejo, ese espejo parado en forma ovalada de cuerpo completo la luz resplandecía directamente a el, dejando a la chica mirarse el cuerpo, ella no tenia a nadie..
Hija única era, no tenía padres alguna vez, recuerdos lejanos ella los tuvo. Un frió día de mayo llovía a cantaron con truenos y relámpagos, sus padres salieron en un coche sin despedirse para no volver jamás de esa tormenta, murieron a las 8 pm por un accidente automovilístico, la niña quedo sola en las tinieblas de su mente con su amigo la soledad, nunca a tenido a nadie, nunca habla con nadie, siempre mirándose al espejo, quedo con las fortuna de sus padres y a la tutela de su tío Ernesto Buquerst Frott el cual el mismo le daba clases para que la niña no tuviera que salir, siempre sola ningún amigo era muy raro que hablara, en el silencio de la soledad ella siempre se encontraba desde chiquita no dejaba de llorar pues un gran vació no la dejaba en paz, se miraba en el espejo día noche sin parar desde que tenia memoria desde que podía caminar se observaba en aquel espejo fino herencia familiar, con toques de ángeles al fondo, y un marco dorado en son de perlas en contorno de par en par.
Día y noche estaba la niña, mirándose tocando al espejo, ella pensaba que su reflejo era su amigo, pero sabía que su mente le mentía sabia que no era verdad pero ya no sabia como escapar de la tortura de soledad, le hablaba esperando una respuesta lo tocaba como si lo fuera a traspasar, mirando fijamente sin sacarle los ojos azules de encima sin querer volver a la realidad, se miraba y se reía se platicaba secretos se daba confianza y intentaba abrazar a aquella figura del espejo, esa niña se llamaba Kenia y al espejo la nombraba Marta.
Una noche Kenia sintió que ya no podría con su alma con su razón, la soledad la succionaba en un vació sin fin que la tenia en vela todas las noches sin poder dormir, lentamente se paro de su cama de sabanas de seda, caminando paso lento hacia su gran espejo mirándolo, observándolo como si fuera su salvación a su soledad.
Con sus ojos tristes al par en par con lagrimas saliendo reflejando la luna en aquel lugar,
Kenia: mi amiga mi amada amiga nunca me dejaras estaremos juntas para siempre, prométemelo... *juntaba sus manos al espejo como queriendo entrar.*
Paso algo que la dejo impactada ella llorando pegada al espejo con la mirada en el... de su reflejo una sonrisa se figuro, saliendo poco a poco el reflejo de aquel ser espectral que tenia su misma figura y su misma voz, cayendo un trueno en el momento que ese ser salio del espejo ,con una sonrisa puntiaguda, pero con unos ojos de ángel, le dio la mano y se perdieron en la fría oscuridad.
A la mañana siguiente el profesor abrió la puerta de la habitación, un charco de sangre fresca frotaba en el piso blanco tornando un rojo carmesí, que miraba el, el espejo tenia unas figuras gravadas, en todo de oro dos niñas idénticas, tomadas de las manos sonriendo……

EL OSITO


Gotas de lluvia cayendo en la ventana como dos almas en pena, como dos almas cerradas al destino cruel, la oscuridad las rodea aventándose desde la orilla, gritando con los truenos, lanzándose al vació donde les espera una muerte al deshacerse en mil rocíos…
El oso asustado fiel a su amo, en la soledad aguarda, en ese oscuro rincón, el peor castigo, el peor destino, con la esperanza se quedo al ver que pasaba la noche fría. Ya de hace meses extrañaba la compañía de su niño con quien solía dormir, con susurros de miedo gritaba ¡saquéenme de aquí!. El osito miraba desde la ventana aquel desfile de muerte de las gotas caer, observando con su ojito en grande con el único que podía ver, su otro ojo arrancado se le salía el algodón, todo manchado de polvo, con tela carcomida por insectos de la suciedad, el oso aguardaba que lo sacaran de su soledad, ya eran 3 meses desde que su amo lo dejo, quien dijo ya soy grande aquel lo abandono, lo destino al rincón donde no podría salir, donde aguardaba día y noche hasta que llegara al fin, ese oso preguntaba ¿Por qué yo? No soy malo, soy buen oso, lo acompañaba a d..ormir, lo acorrucaba en días como este, nos acompañábamos mutuamente escondiéndonos del temor. El cuarto en plena oscuridad, la ventana se iluminaba tras los truenos de gritos de lluvia al caer, el oso con esperanzas exclamaba que su amo volvería por el, cruel destino, cruel soledad amarga y dulce eres hasta el final, el peor castigo que alguien podría tener, es la esperanza del consuelo aquel, hoy en día el oso aguarda en ese oscuro rincón quien sigue esperando que lleguen por el llorando, que lo saquen de ahí ¿si el no hizo nada malo por que lo castigan así?
Noches de lluvia con truenos el suele llorar por su felicidad que no llegara jamás.